El pasado martes apareció una nueva sección en el formulario que hay que llenar para obtener la VISA para ingresar a Estados Unidos. En un apartado opcional, se solicita a los viajeros información "relacionada con su presencia en línea".
En una época caracterizada por un temor constante a la amenaza terrorista, se comenzó a pedir a los visitantes extranjeros sus perfiles de redes sociales para mejorar el control sobre quién entra al país. Es así que se pide al postulante que indique su nombre de de Facebook, Instagram, Google+, LinkedIn y YouTube, entre otras tantas redes.
La norma fue aprobada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos y, de momento, es opcional para quienes deseen proporcionar esta información.
A pesar de que proveer estos datos no es una obligación, la medida ha desatado polémica, con fervientes opositores calificándola como un ataque a los derechos humanos.